Dentro de las entradas ya iniciadas en esta serie que hemos denominado €ntradas €conómicas, que buscan ofrecer sencillos recursos para trabajar la fuerza si no disponemos de salas de musculación o similar a nuestro alcance, completamos la entrada de ayer con una propuesta más concreta para trabajar la propiocepción.
Recordamos que cuando hablamos de propiocepción tenemos que entenderlo como sinónimo de fuerza articular, un trabajo que no debemos obviar entre el desarrollo de la fuerza "protagonista", la muscular.
También debemos recordar que el no disponer de una sala para trabajar específicamente la fuerza no debe crear desánimo ni mucho menos una exclusión de esta capacidad en nuestra planificación.
Cuestiones generales al trabajo propioceptivo.
- Se incluyen saltos y zancadas que provocan inestabilidad articular, es clave ya que es ahí cuando se "ponen en marcha" los propioceptores articulares y el fortalecimiento de las estructuras musculares que sostienen y protegen el conjunto
- Es importante mantener en esa fase de inestabilidad, al menos, entre 1 y 3 segundos
- Pueden incluirse ejercicios de transferencia, éstos pueden ser con balón o sin balón y orientados al salto, velocidad o golpeo, según nos interese (podemos rotar)
- Los trabajos de transferencia serán breves y explosivos
- Aprovechemos para recalcar aspectos de la técnica de carrera: posiciones de tronco, rodilla, etc.
IMÁGENES: El Mundo
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